Linaje Divino

¡Muchacho!¡Trae una jarra de vino!

Hazlo y el viejo Parmenion te contará la historia de Gilgamesh.

No pongas esa cara, tu padre ordenó que se te trate como a un hombre, tal como fue tratado en durante su aprendizaje.

Siéntate, la noche e sperfecta, como aquella en la que nació el héroe persa... ¡claro que yo no había nacido aún! ¡Ni siquiera la culta Atenas había sido fundada! Pero todos conocemos la historia de Gilgamesh, los d esu linaje se han encargado de narrarla por generaciones, por eso, quizá, les tememos ¿cómo no temer a los descendientes de un Semi-Dios?

Ya lo dije, fue una noche como esta, estrellada, silenciosa y con luna llena, la más brillante de aquel año... Igual que cuando tú naciste...

Como decía, una noche única, aquella en la que vino al mundo el hombre que llegaría a los confines orientales del mundo, aquel que forjaría su leyenda en el Este, ahí donde ningún macedonio ha llegado aún y, de hecho, jamás lo hará. Gilgamesh es su nombre.

Toma un trago de vino muchacho, hazte hombremientras escuchas a este viejo que ha sangrado en mi batallas y que sangrará en mil más, como lo hará tú algún día, como lo hizo Gilgamesh.

A los 21 años el joven fue coronado como Rey de Persia tras la muerte de Ankash, su padre. Aunque todo el mundo sabe que su verdadero padre era Zeus, encarnado como el Dios Persa de la tormenta... carajo... no recuerdo como lo llaman...

¡Claro que era hijo de Zeus! ¿Porque lo pones en duda? No me mires así, después de todo hay quienes dicen lo mismo de ti.

Tras dos años de reinado, Gilgamesh armó un ejército de 30 millares de soldados, con los que partió hacia Oriente, donde conquistó ciudades y poblados que encontró a su paso y se irguió como el máximo soberano de todo el Mundo, un reino mucho más extenso que el del Imperio Persa actual.


Si quieres que siga con la historia, tráeme otra jarra de vino... ¡Bien! ¿Dónde estaba?
...
...

Ya recuerdo.

Con 29 años de vida y nada por conquistar, Gilgamesh inició su regreso a Persia. Pero nunca llegó.

La leyenda cuenta que finalmente Zeus lo hizo inmortal y lo llevó al Olimpo. Claro, eso ya lo sabías, lo que no sabes esque en el camino de regreso vió las destrucción que su campaña había provocado y juró regresar para traer paz al mundo que había conquistado. También se cuenta que vivió en solitario entre los mortales por mucho tiempo, cumpliendo proezas propias del mismísimo Herácles, o de tu antepasado Aquíles, si prefieres...

¿Te conté sobre la guerra de Illión?

Tu padre, el Rey Filipo, tiene esa historia entre sus predilectas, sobre todas aquellas partes que no contó el poeta ciego en su Illíada.

Tráele otra jarra de vino al viejo Parmenion, joven Alejandro, y conocerás la historia del caballo más grande que jamás existió.